“Los triunfos [naipes del Arcano Mayor del tarot], que suman veintidós cartas, representan en general a los líderes temporales y espirituales de la sociedad, los poderes físicos de la agricultura, las virtudes cardinales, el matrimonio, la muerte, y la resurrección de la Creación; los variados juegos de la fortuna, la sabiduría y la estupidez, el tiempo que todo lo consume, etc.” Antoine Court de Gébelin.
El Tarot es una de las herramientas de iluminación y autoconocimiento más antiguas con las que la humanidad cuenta. Su gran ventaja por encima de otros oráculos es su formato: un mazo de 78 cartas ilustradas, muy fáciles de llevar y de usar. Cada una de estas cartas está ilustrada, y estos elementos poseen una interpretación abierta. Desde alquimistas hasta filósofos, pasando por amas de casa y psicoanalistas, los tarotistas son personas comunes que tratan de descifrar los designios del Destino a partir de esas figuras, de los Arcanos Mayores y de los arcanos menores.
Orígenes del Tarot
No se sabe a ciencia cierta de donde proviene el Tarot. Se cree que su nombre se debe a que es una versión ilustrada de la Torah (Libro de la Ley) judía. Otros creen que proviene del antiguo Egipto, y que su nombre quiere decir “Camino Real”. Una tercera escuela cree que se llama así porque alude a la región recorrida por el río Taro, en Italia, de donde proceden los primeros mazos de este oráculo.
En todo caso, se cree que fue introducido en Europa, durante la temprana edad Media, por los árabes, con mazos provenientes de China. Al parecer los árabes usaban naipes comunes para esta arte adivinatoria. “Naib”, la palabra de la que proviene “naipe” quiere decir “sabio”.
La primera referencia histórica concreta sobre el Tarot data de 1367, cuando se publica una ordenanza en la ciudad de Berna (Suiza) que prohibía el uso de estas de cartas. El primer Tarot impreso del que se tiene noticia el llamado Tarot Visconti, del que se conservan once mazos en la actualidad. Fue diseñado por Bonifacio Bembo entre 1428 y 1450, y es notable que excluye en los Arcanos Mayores a El Diablo y La Torre. Poco después pesó sobre el Tarot (a los que la Iglesia llamaba “Triunfos”) una suerte de prohibición, pues se decía que Dios las odiaba más que a nada.
Sin embargo, y con la invención de la imprenta de tipo móviles, las cartas de Tarot encontraron una mayor difusión, si bien durante el siglo XV se diversificaron en diseño y número de cartas: las hubo de 100 arcanos, algunas pintadas a mano, bañadas en oro… Fue el Tarot de Marsella, publicado en esa ciudad en el siglo XVI por la Casa Camoin, el que definió para siempre el número de Arcanos mayores y menores y su representación, aunque no se ha conservado el nombre del artista que los diseñó.
Las cartas del Tarot: Arcanos Mayores
El Tarot de Marsella ha definido el mazo de Tarot como lo conocemos hoy en día, sobre todo en los que se refiere a los llamados Arcanos Mayores. Estas son 22 cartas que se usan con mayor frecuencia en la lectura del Tarot. El experto tarotista del siglo XVIII Eliphas Lévi dice que los Arcanos Mayores son “expresión de las fuerzas y hechos fundamentales de la Creación”, fuerzas arquetípicas que rigen nuestras vidas y nos permiten comprender al Cosmos.
Estos Arcanos Mayores son 22, y se trata de los siguientes. Anotamos sus interpretaciones positivas y negativas.
0. EL LOCO: LEMAT
La fuerza del instinto, pero también la falta de experiencia y de conocimiento. Es el protagonista del Tarot. Es decir: cada uno de nosotros, sus consultantes.
I. EL MAGO: BATELEUR
El valor del conocimiento, pero también el hombre encerrado en sí mismo.
II. LA PAPISA: PAPESSE
La fuerza del espíritu, pero también lo femenino negado (se cree que representa un tiempo en que las mujeres tenían acceso al sacerdocio).
III. LA EMPERATRIZ: L’IMPERATRICE
La evolución personal, el crecimiento individual, la fertilidad, pero también las pasiones negativas.
IIII. EL EMPERADOR: L’EMPEREUR
El poder económico, la fuerza física, la seducción amorosa, pero también la violencia y el hartazgo.
V. EL PAPA: LE PAPE
La adaptación social, el poder espiritual, el compromiso, pero también los valores caducos y la intolerancia
VI. EL ENAMORADO: L’AMOREUX
El amor físico y la solidaridad, pero también el fracaso de una pareja o sociedad
VII. EL CARRO: LE CHARRIOT
El poder de las decisiones personales, pero también las circunstancias que no podemos controlar.
VIII. LA JUSTICE: LA JUSTICIA
El poder kármico, el poder jurídico, pero también lo injusto y lo azaroso.
VIIII. EL ERMITAÑO: L’HERMITE
El poder individual y la belleza de la propia personalidad, pero también la soledad.
X. LA RUEDA DE LA FORTUNA: LA ROUE DE FORTUNE
La continuidad de lo ciclos naturales, pero también el azar y sus caprichos.
XI. LA FUERZA: LA FORCE
La fuerza de voluntad y el autodominio, pero también la indefensión y la enfermedad.
XII. EL COLGADO: LE PENDU
La capacidad de aceptación y de resiliencia, pero también el autoengaño.
XIII. ARCANO SIN NOMBRE: ARCANE SANS NOM
También conocido como La Muerte, y representa lo cambios positivos y lo cambios negativos.
XIIII. TEMPLANZA: TEMPERANCE
El carácter y su forja, pero también la depresión y la angustia existencial.
XV. EL DIABLO: LE DIABLE
La impulsividad y el deseo, pero también el aspecto negativo de cada uno.
XVI. LA CASA DE DIOS: LA MAISON DIEU
También conocida como La Torre, y representa la creatividad y la perseverancia, pero también la ambición desmedida.
XVII. LA ESTRELLA: LE TOULE
La independencia, pero también el fracaso.
XVIII. LA LUNA: LA LUNE
La maternidad y la paternidad, la creatividad y la fertilidad, la pero también la dependencia y la austeridad.
XVIIII. EL SOL: LE SOLEIL
Los nuevos inicios y el éxito, pero también el fracaso y la caída.
XX. EL JUICIO: LE IUGEMENT
La redención y la capacidad de reinventarse, pero también la culpa.
XXI. EL MUNDO: LE MONDE
Las relaciones sociales y el autodescubrimiento, pero también la discriminación y el aislamiento.
¿Cómo usar el Tarot?
El Tarot comprende a la vida como un choque de fuerzas, positivas y negativas, que moldean a las vidas de cada uno. Gracias a este mazo, podemos saber el devenir y el sentido de esa lucha, pues a través de las cartas nos muestra cómo se van a relacionar las potestades que rigen nuestras vidas. Lo hace de dos maneras.
Al elegir las cartas del mazo, si la carta sale en su posición normal, tiene un sentido positivo, si sale invertida es negativa.
Al colocar las cartas para responder las preguntas que se hacen, se colocan en conjunto, formando diferentes figuras. Estos arreglos reciben el nombre de “tiradas”. Su interpretación es más compleja, pues involucran la relación entre sí de más de un Arcano.
Por ejemplo: tres cartas alineadas constituyen una Tirada Situacional. Vista de derecha a izquierda, la primera carta de esta tirada representa al pasado, la segunda al presente y la tercera al futuro.
Dos cartas que forman una cruz constituyen la tirada de los obstáculos: la carta vertical es el problema que sufre el consultante, y la carta que la cruza aquello que impide su resolución.
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